LA IMPORTANCIA DEL ENTRENAMIENTO DE FUERZA EN LA SALUD.
A menudo se relaciona el entrenamiento de fuerza con músculos voluminosos y olvidamos que no todo es eso y hay una parte mucho más importante. Es posible realizar dicho entrenamiento sin ganar un excesivo tono muscular, obteniendo los múltiples beneficios que ofrece. En este artículo, nos centraremos en los principales beneficios que conlleva el entrenamiento de fuerza a la salud, así como las principales recomendaciones para su realización.
Antes de nada, el entrenamiento de fuerza es aquél que conlleva vencer una resistencia. Ahora bien, este tipo de entrenamiento que desde antaño se ha ido correlacionando únicamente con lo estético, lo visual, así como el verse bien; sin embargo, apenas se conocen los beneficios que puede aportarnos en la salud. Muchos aún no entienden que el entrenamiento de fuerza es MEDICINA antes que estética.
Beneficios para la salud al mejorar el rendimiento neuromuscular
El rendimiento neuromuscular consiste en la mejora de la fuerza, potencia y resistencia muscular. Altos niveles de fuerza muscular se han asociado con una mejora significativa en el perfil de factores de riesgo cardiovascular y menores riesgos de desarrollar limitaciones en la función física; esto supone un menor riesgo de padecer enfermedades así como disminución de la tasa de mortalidad. Esos cambios que supone el entrenamiento, que desde fuera pueden parecer únicamente físicos, suelen estar acompañados de una disminución en los niveles de glucosa, un aumento en la sensibilidad a la insulina y una disminución en la presión arterial.
Durante años, estos beneficios estuvieron exclusivamente asociados al entrenamiento aeróbico. Es fundamental entender que la realización del entrenamiento de fuerza, según la evidencia actual, podría ser incluso tan efectiva como el entrenamiento aeróbico en el tratamiento de ciertas patologías como la diabetes o el sobrepeso.
Pero… ¿eso es todo? ¿hay más beneficios relacionados con el entrenamiento de fuerza?Así es, el aumento de la masa muscular y de la fuerza también ha demostrado incrementar la densidad mineral ósea, así como la fuerza específica de los huesos que han sido sometidos a cierto estrés. Esto puede servir como una medida valiosa para la prevención, ralentización o reversión de la pérdida de masa ósea en individuos que tuviesen osteoporosis.
Músculo esquelético, un órgano altamente “funcional”
Todos estos beneficios están asociados al entrenamiento de fuerza, ya que como adaptación al entrenamiento, el cuerpo provoca el aumento de la masa muscular y la disminución del porcentaje de grasa. Vamos a pasar a algo realmente importante: el músculo esquelético es considerado uno de los tejidos más dinámicos y plásticos del organismo debido a su alta capacidad de adaptación. Éste músculo contribuye significativamente a distintas funciones musculares, permite generar fuerza y potencia, mantener la postura y producir movimiento. A nivel metabólico y de salud, un alto desarrollo muscular puede marcar la diferencia entre una persona sana frente a otra con un sinfín de patologías.
Este artículo no puede finalizar sin una de las funciones más importantes que tiene el entrenamiento de fuerza: el mantenimiento de la masa magra en el adulto mayor. La sarcopenia se define como la pérdida de masa muscular (incluyendo en la actualidad la pérdida de fuerza/potencia conocida como dinapenia). Los adultos sedentarios presentan una pérdida del 3-8% de masa muscular por década, acompañada de una reducción en la tasa metabólica de reposo y un aumento considerable en el porcentaje de grasa.
Dicha pérdida de masa muscular equivale a una gran pérdida de masa muscular por año y se incrementa en un 5-10% cada década pasados los 50 años. Considerando que la masa muscular representa aproximadamente el 40% del peso corporal y tiene una alta influencia en otros componentes de la salud, la pérdida de masa muscular viene acompañada de una variedad de problemas. Numerosos estudios han demostrado que relativamente breves sesiones de entrenamiento mantenido en el tiempo (12-20 series de entrenamiento con un esfuerzo medio) realizando dos o tres veces por semana de manera no consecutiva podrían incrementar la masa muscular en adultos mayores.
Por todo ello es fundamental conocer los numerosos beneficios que van de la mano del entrenamiento de fuerza. La correcta evaluación y prescripción del ejercicio posee una gran cantidad de mejoras en nuestra calidad de vida. Siempre de la mano de un personal formado y debidamente cualificado para ello. Desde pequeños a adultos, sujetos sanos o con patologías, deportistas profesionales o amateurs, deben ser motivados a la realización prolongada en el tiempo del entrenamiento de fuerza, ya que como hemos podido comprobar… EL ENTRENAMIENTO DE FUERZA ES MEDICINA.
Escrito por: Beatriz Pascual Trillo
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