¿Conoces los beneficios de la natación en los más peques?
De entre los deportes existentes, sabemos que la natación es uno de los más completos que existen. En general, la promoción de la actividad física es de gran importancia, siendo especial fomentarla desde la etapa preescolar; de entre todas las opciones, la natación es una de las elecciones habituales. Además, el agua es un elemento del día a día en la vida de las personas, por lo que coger confianza y aprender a nadar hará a los niños y a las niñas estar más seguros y disfrutar en la piscina o en el mar, en las vacaciones o en cualquier lugar donde poder bañarse.
Diversos estudios confirman que practicar natación desde edades tempranas conlleva múltiples beneficios, pero… ¿sabías que estos beneficios eran tantísimos? Tantos que es considerada la actividad física que mayores ventajas reporta en la infancia. A continuación, te contamos algunos de los más importantes:
Un deporte completo debido al gran número de músculos que intervienen. Permite ganar fuerza al realizar esfuerzos para avanzar.
Mantiene sano el sistema cardiovascular así como respiratorio prácticamente a cualquier edad. Los niños y las niñas, gracias a la natación, crecen con un corazón y unos pulmones más fuertes en parte gracias a los ejercicios respiratorios que se realizan en el agua, lo que favorece la oxigenación y que el traslado de la sangre sea más eficiente.
Regula el colesterol y previene la obesidad y afecciones como la hipertensión arterial o el sobrepeso.
Mejora el metabolismo en niños y niñas con diabetes, ya que nadar reduce el nivel de glucosa en la sangre y además aumenta la eficiencia de la insulina.
Mejora la flexibilidad y favorece la coordinación y la agilidad al tratarse de una disciplina muy técnica y global. A nivel general, mejora el desarrollo psicomotor por la libertad y continuidad de movimientos, aprendiendo conceptos básicos de desplazamiento y de distancia a una edad temprana.
Favorece el desarrollo del coeficiente intelectual; está demostrado que los bebés que han practicado natación en los 3 primeros años de vida desarrollan una mayor percepción del mundo que les rodea, obteniendo una estimulación con efectos muy favorables sobre la inteligencia, y les ayuda a ser más creativos y observadores. Además, el agua estimula la capacidad de juego, hecho que repercute positivamente en futuros aprendizajes.
Ayuda a relajarse dado que el agua tiene propiedades relajantes y anti-estresantes que permiten a los niños y a las niñas liberar el estrés o la tensión que puedan acumular, y les permiten dormir mejor.
Al igual que otros deportes, favorece la socialización, con un añadido, porque la natación permite adquirir nociones y capacidad de salvamento aprendiendo a flotar, a girarse o agarrarse. Además, se sentirán más seguros, adquiriendo mayor seguridad e independencia.
En un ambiente lúdico y recreativo se desarrollan como personas y con el entorno de manera natural junto a otros niños, lo que les permitirá relacionarse mejor aprendiendo a compartir. Los peques tendrán más confianza al comunicarse y desarrollarse en grupo, al estar en contacto con instructores y otros niños y niñas.
Ayuda a la correcta estimulación de las personas con problemas neurológicos y parálisis cerebral.
Todo eso entre otras cosas, como ayudar al sistema inmunológico (ayuda al sistema a combatir enfermedades) o ayudar ante ciertas enfermedades como pueden ser la hiperactividad, el autismo, la hipotonía (ya que nadar ayuda a corregir la disminución del tono muscular) o espasticidad (pues los ejercicios acuáticos ayudan a disminuir la rigidez, en parte gracias a la temperatura del agua y los movimientos).
Sin lugar a dudas, la natación es una de las mejores opciones para el desarrollo del cuerpo desde pequeños; con sus múltiples beneficios garantiza una base de salud casi de por vida. En un deporte donde todo parecen ventajas como son el desarrollo de la motricidad así como de la inteligencia, la socialización o la armonía corporal lo mejor es que cualquiera que practique dicho deporte, en cualquier etapa de su vida, obtendrá grandes beneficios.
¡Quédate con el que quieras y a chapotear!
Espinosa Chamba, G. G. (2016). La práctica de la natación como un medio para potenciar el desarrollo motriz.
Lastra, M. A. S., Lemos, R. I. M., Díaz, R., Villanueva, M., & Pérez, C. A. (2020). Efecto de un programa de natación en la condición física de preescolares. Retos: nuevas tendencias en educación física, deporte y recreación, (37), 48-53.
Rodríguez, C. C. (2011). La importancia de la práctica de la natación en la educación de los niños y las niñas. Lecturas: Educación física y deportes, (161), 8.
Vera Rojas, P. O. (2012). Beneficios de la natación en el desarrollo coordinativo e integral de niños de 6 a 7 años (Bachelor’s thesis, Universidad de Guayaquil. Facultad de Educación Fisica Deportes y Recreación).